Mariela Burgos e Verónica Rodríguez, activistas ambientales hondureñas, participaron hoy a las 12h en una mesa redonda en el Salón de Actos de la Escola Politécnica Superior de Enxeñería de Lugo. Esta intervención, enmarcada en el programa Mulleres bravas de Honduras e Galicia. Tendendo pontes entre defensoras da vida impulsado por Amigas da Terra e Enxeñería Sen Fronteiras con la financiación de la Xunta de Galicia, tuvo como objetivo acercar las luchas ambientales de las mujeres hondureñas, la importancia de entenderlas como responsabilidad global, las iniciativas y alternativas que proponen y el imprescindible labor de las mujeres en estos procesos.

La Escola Politécnica Superior de Enxeñería de Lugo acogió a las “mulleres bravas” de Honduras esta mañana con la bienvenida de Rosa Romero, su directora. Romero comenzó el acto recordando que, para hacer frente a todos los retos ambientales que tenemos, es fundamental cuidar de nuestro rural y que, para eso, no podemos olvidar el imprescindible labor de las mujeres.

Honduras y Galicia afrontan luchas ambientales muy similares. Macroproxectos empresariales que contaminan tierras y aguas, afectan a los ecosistemas y destruyen las comunidades a las que ni siquiera se tiene en cuenta a la hora de tomar decisiones.“No somos del mismo país, pero si pertenecemos al mismo mundo”, reivindica Verónica Rodríguez, campesina, lideresa comunitaria y activista hondureña. Al igual que la problemática es común a todas, las mujeres bravas defienden que también deben serlo las luchas y soluciones.

En ámbolos dous territorios, as mulleres lideran loitas contra estes proxectos que antepoñen o beneficio económico empresarial ante todo. As mulleres defenden a terra, os dereitos e a vida. Suman entre elas forzas de cambio e sembran os xermes de moitos movementos de resistencia que se mobilizan por garantir dereitos.

Esta labor origina resultados muy positivos en las comunidades, pero muchas veces a costa de la libertad de las mujeres lideresas. En Honduras, mujeres son asesinadas por luchar por tierras libres y sociedades justas. Así lo cuenta Mariela Brugos, mariscadora y activista ambiental: “Me han apuntado, me han puesto el arma en la cabeza y me han dicho ‘o te vas, o tu cuerpo va a ser alimento para los langostinos’”.

Además de los riesgos implícitos a la labor de defensoras, las mujeres se encuentran con muchas barreras a la hora de llegar la estos puestos de liderazgo y toma de decisiones. “Como mujeres bravas también trabajamos en el machismo, pues en la cultura hondureña es bien palpable. Cuando yo empecé a salir, a aprender cosas, me costó mucho”, asegura Verónica Rodríguez. Sin embargo, la campesina reivindica que todos esos pasos que dio le sirvieron para “romper todas las barreras”: “si no lo hubiera hecho, no estaría aquí, con mi producción, mi forma de pensar, sintiéndome libre y empoderada”

AXENDA DE ACTIVIDADES DO 6 AO 14 DE MARZOLa visita continúa mañana en Pontevedra, con su participación en la mesa “Mujeres y cambio climático” en la Facultad de Ciencias de la Educación de la Uvigo a la 13h y, por la tarde, en el XIV Curso de Especialización Comunicar para el Cambio organizado por la Asociación Gallega de Comunicación para el Cambio Social en la Facultad de Comunicación de la Uvigo.